Crónica Dreambeach Villaricos 2017
Después de todo un año esperando, por fin llegaba el fin de semana más intenso del año, ya que una vez más, y ya van 5 años consecutivos, poníamos rumbo a Andalucía para disfrutar del quinto aniversario del, para mí, mejor festival de música electrónica que podemos encontrar dentro de nuestras fronteras. Nos estamos refiriendo a Dreambeach Villaricos que, en este 2017, iba a ofrecer 5 días llenos de música.
La primera jornada a la que asistimos fue la del viernes, en la que no nos podíamos permitir el lujo de perdernos ni un solo minuto por lo que a eso de las 22:00H de la noche, nos colocamos frente a sus puertas para hacer nuestra entrada. Tras algún que otro problema para dar con la zona de acreditaciones, nuestro comienzo de festival se retrasó más de lo esperado, hasta que, por fin, a las 23:00 pudimos cruzar sus puertas para, después de hacer el cambio pertinente de tokens y una leve parada por sus barras (en este punto destacar que en ningún momento del festival hubo que esperar grandes colas), ver el cierre de uno de nuestros artistas fetiches: COYU, que estaba de estreno con «1+1», el primer single de su álbum debut, el cual recomendamos enérgicamente. Un set lleno de calidad y constancia que supo levantar al público con una contundencia al alcance de muy pocos.
Una continuidad que vimos interrumpida con la actuación de uno de los artistas más excéntricos de la industria musical como sin duda es SETH TROXLER que, en mi opinión, entró mucho en la experimentalidad y espontaneidad del momento para, quizás, bajar un poco el clima de Dreams Tent. Sí que es verdad que repaso temas de Jeff Mills, Harry Romero o Paul Ritch pero no terminó de engancharme.
Continuando con el capítulo del viernes, a continuación daba comienzo la actuación de uno de los mejores productores de los últimos años, como es JORIS VOORN, quien, con un set bastante correcto recuperó la atmósfera creada por Coyu dejando a un lado su lado más melódico para apostar por una contundencia que, unida a la espectacular iluminación de láseres y a una decoración bastante cuidada, supo trasladarnos a un ambiente de club de Berlín. Sí que es verdad que en su set no faltaron algunos de sus clásico como «Ringo» o «Esquape» con los que puso una guinda perfecta a su actuación.
A continuación, decidimos dar una vuelta por el festival para echar un vistazo al resto de escenarios, de modo que nos dirigimos a la Open Air San Miguel, que en esta primera jornada acogía a La Resistencia por lo que su público era bastante distinto a lo que nos tiene acostumbrados este escenario al que consideramos «nuestra casa» dentro de Dreambeach Villaricos. Allí pudimos rememorar a viejas glorias de los 90 como PACO PIL con su mítico «Viva la Fiesta», con el que hay que reconocer que los asistentes se volvieron locos.
Tras recorrer el festival y hacer un alto en el camino para recobrar fuerzas en su zona de restauración, no pudimos evitar detenernos en la Bull Tent en donde este año se hizo un esfuerzo por ampliar el aforo con una carpa semi-abierta que permitía que el aire corriese, algo que de verdad se agradecía. El destino quiso que no nos perdiéramos la actuación de la brasileña FERNANDA MARTINS, quien mostró todo su potencial al frente de los platos obligándonos a disfrutar de su set completo sumergidos en un gran ambiente.
Con las piernas algo cansadas pero felices, el sábado volvíamos a Dreambeach Villaricos para disfrutar de uno de los grandes reclamos de la noche, ya que MODESTEP, que hace unos años tuvieron que cancelar su actuación a última hora, nos deleitaron con un live en el que el ahora dúo irrumpió con una gran elegancia y constancia manteniendo al público enfebrecido de principio a fin y, como no podía ser de otro manera, con tracks como «Another Day», «Show Me A Sign» o «Sunlight» de su primer disco ‘Evolution Theory’ o «Rainbow» de ‘London Road’, convirtiendo a la Open Air en todo un culto al Live y al Bass.
Sin movernos de «nuestro» escenario, a continuación iban a tener lugar tres de las mejores actuaciones que nos podemos encontrar en la actualidad en lo que al Drum & Bass se refiere. La primera de ellas fue todo un descubrimiento ya que HIGH CONTRAST supo trasladar todo el estilo inglés a la playa de Villaricos con una gran elegancia mezclando temas como su propio remix de Adele «Hello» o «Questions» en el que colabora con Boy Matthews.
La continuación fue in crescendo a pesar de los «problemas de logística» que retrasaron el resto de actuaciones cosa de media hora. Situados en las 2:10H el trío holandés NOISIA, el cual ha visitado Dreambeach en varias ocasiones, hizo su estelar aparición para presentar su espectáculo «Outer Edges» ataviados con unas escafandras de astronautas iluminadas al ritmo de la música, acompañados de unos grandes visuales. Un repaso por la trayectoria de este trío con grandes tracks como «The Aprroach», con el que comenzaron, pasando por «Diploddocus», «Voodoo», «Mantra», «Tentacles», su remix de «Smack My Bicht Up» o el giño a I Am Legion, formación que comparten con Foreign Beggars, con el track «Choosing For You».
Sin recuperarnos de esto, daba comienzo la actuación del británico ANDY C, también en la Open Air. Una visita de la que disfrutábamos por segunda vez (ya que en 2015 también tuvimos el placer de verle en Dreambeach) que volvería a «rompernos» en dos amenizados por las rimas de un MC que muchos quisieran, las cuales sumadas a la tremenda selección musical escogida por el británico, volvió loco a un público que no paró de hacer pogos durante la intensísima hora y media que duró su actuación. No faltaron temas como «Bricks Don’t Roll» de DJ Hazard, «Suicide Bassline VIP» de Mefjus, el bootleg de The Prototypes de «LRAD» de Knife Party o «Timewarp VIP» de Sub Focus, quien tomaría el relevo a las 4:45H.
Nuestra tercera y última jornada dio comienzo con quizás la actuación más esperada por nuestra parte, el live de PENDULUM, quienes 7 años después se subían de nuevo a los escenarios para deleitarnos con iconos de su música como «Tarantula», «The Island», «Propane Nightmares», «Watercolour», «Witchcraft», … además de hacer varios guiños con algunos de los tracks que han publicado como Knife Party, como «Internet Friends». Una actuación con la que los incondicionales de la Stage Brugal saborearon lo que son los pogos de verdad y una vertiente bastante más contundente de la música electrónica a lo que están habituados a escuchar en el escenario principal.
A continuación y sin perder un minuto, nos dirigimos a la Open Air para disfrutar de otro live, en esta ocasión el del británico WILKINSON, quien estuvo acompañado entre otros por Becky Hill, para cantar en directo algunos de sus éxitos, como «Afterglow», o Shannon Saunders, deleitándonos con el track «Breathe». Por supuesto, también sonaron temas como «Take You Higher», «Half Light», «Dirty Love», «Need to Know» o «Sweet Lies», entre otros muchos. Sin duda una actuación que nos sorprendió muy gratamente a todos convirtiéndose en una de las mejores de esta edición.
Sin embargo esto no acaba aquí ya que la guinda del pastel iba a ser una de las pocas actuaciones que agradecerían todos los amantes del Dubstep de calidad, ya que BARELY ALIVE hacía su entrada en escena. Un sesión llena de energía con un gran reportorio de producciones propias como «Poison Dart«, «Elastic Nightmare» o «Elephant» que hizo que el público asistente no se arrepintiera de aguantar hasta altas horas de la madruga pese al cansancio acumulado.
Con todo esto, dimos por finalizada nuestra visita al 5º Aniversario de Dreambeach Villaricos que, una vez más, y pese a su largo recorrido durante estos últimos años, logró superar las expectativas que teníamos puestas sobre el evento. Una organización bastante correcta, un gran sonido y una cartel espectacular que hace que se convierta en, para nosotros, el mejor festival de nuestro país. Lo único malo es que ahora falta todo un largo año para su sexta edición a la que, con total seguridad, volveremos a asistir.
Txt. Javier Rivate & Laura Albarrán
