Y es que el FIB…sigue siendo el FIB
Desde mis primeras visitas como grupie y clubber desbocado al Festival Internacional de Benicassim (hará 15 años)…. hasta mi visita ya más sosegada y pausada en esta 24 edición, he podido comprobar que el FIB tiene algo especial que no tienen el resto de Festivales en España (del resto del extranjero no hablo porque no he tenido la suerte de disfrutar de otros en tierras lejanas). Cuando uno llega a Benicassim, al mismo Benicassim ciudad, ya se respira un aire festivalero que te contagia desde el minuto cero. Quizás será por la comunión entre Instituciones municipales, los propios ciudadanos de Benicassim, la Guardia Civil y todo aquel que está inmerso en la organización y desarrollo del Festival. Todos reman para que año tras año el FIB sea un éxito, con buenas caras, buenas palabras, mucha amabilidad y agradecimiento. Se saben de la importancia que representa este festival en la economía de la zona de la que todos se benefician y que desde hace 24 años luchan porque el FIB sea la realidad que es…y es que el FIB sigue siendo el FIB.
Es muy complicado mutar, fluctuar con las nuevas generaciones, saber lo que los nuevos FIBERS quieren y si hace años parecía que la organización no daba con la tecla, he comprobado que este año ha sido un año de aciertos y de mucha versatilidad en el cartel. Quizás porque 24 años son una gran brecha y, con un cartel plagado de cabezas de cartel que son viejas glorias de la música pop y rock (dígase Pet Shop Boys, LIam Gallagher, The Killers o Madness), pero a su vez abriendo hueco a los nuevos gustos y modas (Travis Scott o C.Tangana), lo cual acentúa más la diferencia de edades y de gustos musicales. Pero lo que podría haber sido un desencuentro, ha terminado siendo un acierto. Los nuevos FIBERS se abren paso y con ellos el Festival debe mutar. Prueba de ello es la masiva afluencia de púbico en la actuación de C.Tangana que desbordó las mejores expectativas. El FIB está en constante mutación y en constante búsqueda de nuevos valores y talentos (aún recuerdo cuando en el año 2007 tuvimos la suerte de ver a una gran “Amy Winehouse” cuando aun no era una superestrella). Por ello, el FIB es una actividad constante de búsqueda de las nuevas tendencias, toques exóticos, junto con las fórmulas consagradas que le han llevado a estos 24 años de vida (no sin altibajos y sin críticas feroces por parte de muchos) a ser lo que es, el festival de referencia en España.
Metidos en faena de lo que ha sido esta 24 edición, no voy a destacar día por día ni grupo por grupo, sino tiene más sentido marcar cuales han sido los momentos que desde mi punto de vista lo han marcado (para bien en el mayor de los casos):
- Nuevos ritmos, nuevos estilos, nuevos Fibers.
Como decía Radio Futura…. “El futuro ya está aquí”. Uno de los secretos del FIB es sin duda su capacidad de reinvención y regeneración. Desde aquella edición en el velódromo de Benicassim cuando tocaron por primera vez The Charlatans hasta su actuación en la jornada del viernes de esta edición 2018, han pasado varias generaciones (alguna huyó al grito de “no volveré” después de la edición de 2008) dejando todas ellas o su huella y su impronta en la sinergia de este festival. Los nuevos Fibers ya están aquí con ritmos urbanos, trap, Funky…incluso con toque Reguetton, pero es lo que la nueva sociedad demanda. Nos guste o no, nos hacemos mayores y nuevos Fiber vendrán, muchos de ellos ya han llegado para quedarse. Y bendita sea la regeneración que postergue nuestro querido FIB por otros 24 años mínimo.
- Grandes momentos y actuaciones.
Cada uno tendrá su actuación preferida, pero de lo visto en este FIB 2018, me quedo con 5 momentos épicos:
- WOLF ALICE: Sin duda una de las bandas revelación de este año 2018 cuya actuación en el FIB es digna de mención. Dignos herederos de The Cramberries, su fuerza y potencia en el escenario es brutal y con una conexión con el público que en pocos momentos conseguí ver en esta edición.
- JUSTICE: Nunca defraudan y en esta ocasión se les notaba que querían dar un golpe encima de la mesa. Su ubicación cerrando el escenario principal el domingo, no era casualidad y no defraudaron. Una actuación mítica que terminó con los franceses abrazados a sus seguidores de primera fila, donde bajaron a degustar las mieles del éxito cosechado después de su gran actuación. Un clásico de los festivales de todo el mundo desde aquel mítico LP “Across”.
- MADNESS: Sin duda el gran concierto de esta edición 2018 ha sido el ofrecido por esta mítica banda de los 70/80 en la que desde los más imberbes a los más vetustos disfrutamos de hora y media de su mejor repertorio, con el mejor sonido que se ha sacado del escenario principal (se notan las canas y la profesionalidad) y una comunión de 4 generaciones digna de admiración. Mucho podemos criticar a nuestros queridos “British” que son los que en un 55/60% han llenado esta edición 2018 (aunque allí “in situ” parece un porcentaje mayor….), pero en cultura musical…no les gana nadie. Daba gusto ver como niños de 12 años cantaban el “Our House” con sus padres o grupos de amigos de 18 añitos saltaban al grito de “One step beyond”. Dudo mucho que nuestras generaciones más jóvenes bailaran al ritmo de “Mecano” o incluso que asistieran al concierto y menos que se supieran todo su repertorio….. cuanto tenemos que aprender.
- DJ AMABLE: Clase magistral a los platos de este gran Dj que año tras año, actuación tras actuación nos demuestra que es, sin ninguna duda, el mejor Dj español de Indie/Pop/Rock. De hecho congregó en su actuación del escenario Visa a bastante más público que muchos grupos top. Me rindo a los pies del Maestro Yoda de las mezclas festivaleras.
- LEY DJ: ¡Ha nacido una estrella! Cuál fue mi sorpresa cuando llegando al escenario Las Palmas en la última actuación del jueves, descubro a esta Dj española, que se metió en el bolsillo a todos los allí congregados con mezclas muy versátiles, una gran técnica y sobre todo una capacidad de sorpresa…que solo recuerdo en aquellos primeros años de los 2 Many Djs. Desde NRF MAGAZINE, seguiremos la pista de esta Dj, que supo combinar los hits de toda la vida con temas muy actuales y hacer bailar a más de 5000 personas en un foro tan complicado y majestuoso como es el escenario Verde (actual Las Palmas del FIB).
- Escenario South Beach
Uno de los grandes aciertos del FIB 2018 ha sido la incorporación de este escenario. Una fiesta continúa desde primeras horas de la tarde, donde el público daba rienda suelta a sus disfraces, a sus ganas de diversión, acompañado de una música de todos los tiempos, muy fresca y, en ocasiones, bien mezclada con bastante gusto y sentido, que, a mí personalmente, me ha sorprendido muy gratamente.
En ese escenario hemos podido comprobar cómo la esencia del FIB de hace 10/15 años se mantiene, como se puede congregar a 4 generaciones en una misma pista de baile en armonía.
Le damos la enhorabuena al FIB por este gran acierto…… lo único que si se pudiera pasar el limpiafondos a diario a la piscina…..sería un poco más agradable.
- Gran soundsystem, gran logística y gran organización.
24 años organizando el mejor festival de España se nota. Desde que llegas al reciento del FIB te das cuenta que está entrando en un macro reciento, organizado al milímetro y que poco o nada falla. Todo el mundo con su sonrisa en la boca, buena atención, limpieza en los baños, seguridad profesional y amable, una departamento de Prensa comandado por «Gus» que nos ha facilitado la vida y nos han tratado como en casa. Sin duda un gran festival lo componen las grandes cifras, pero los pequeños detalles son los que se te quedan….y de estos y de los otros FIB tiene muchos.
Una vez indicados los puntos fuertes de este FIB 2018, tengo que mencionar que algún punto negro también ha habido:
- ¿Dónde quedó la electrónica?
Míticas era aquella macro-carpa “Hello Moto” en la parte alta del FIB, donde los clubbers se congregaban para bailar hasta que amanecía. Desde hace algunas ediciones, este ritual ha pasado a mejor vida, terminando las jornadas sin aquella electrónica de calidad con aquellos carteles míticos de grandes figuras de la electrónica. ¡Se echa de menos! Y no solo lo echo de menos yo….sino aquellos miles de Fibers que ya no acuden por falta de electrónica de calidad. Mucho público español solo iba a esa carpa, y sin ella, ya no van. Mucho público se ha perdido con esta decisión, la cual insto a que para la próxima edición, sea estimada y podamos volver a disfrutar de aquellos míticos amaneceres como aquel en el que pudimos escuchar el “The age of love” de Jam & Spoon pinchado por Laurent Garnier (queremos volver a vivir estos momentos).
- Mucho volumen de Djs…… poca calidad real.
Habiendo pasado por casi todas las área donde los djs realizaban sus sets…. he podido comprobar que mucho Dj y poca calidad. Sintiéndolo mucho tengo que dar un tirón de orejas a los cierres de “Razzmatazz” y “Ocho y medio djs” en especial. No todo vale en este negocio y venir a tocar al FIB requiere un poco más de trabajo y seriedad. No estamos en una atracción de feria donde puedes darle al play y olvidarte…. ¡señores esto es el FIB!
- ¿Dónde se dejaron los ingleses su educación?
Hay cosas que no cambian y esta sigue siendo una de ellas. Nuestros hermanos de tez blanca y mejillas sonrojadas siguen pensando que este es su territorio y adolecen, en muchos casos, de una educación y civismo mínimo….pero bueno cosas que siempre han pasado en el FIB y que muy a mi pesar viene de fábrica.
A modo de conclusión, mi nota general del FIB 2018 es un 7.5; desde NRF MAGAZINE queremos dar la enhorabuena a la organización del FIB (Maraworld) por una edición impecable, donde hemos echado en falta a más público español (no nos cuadra ese 60 % ingleses – 40% españoles); donde se nos ha demostrado que el FIB sigue siendo el FIB… y que ya estamos contando los días para poder asistir a la próximo edición donde cumple 25 años. Dar las gracias a todo el Staff en general, y en particular a todo el departamento de Prensa (con el cual compartimos en algunos días hasta piscina) por ser unos grande profesionales y muy amables. GRACIAS FIB por existir y por ponernos cada año una sonrisa en la boca que dura 11 meses y 26 días.
Texto: Fernando García.