ORISHAS en las Noches del Botánico: ¡La espera mereció la pena!

Después de 8 años, definitivamente mereció la pena esperar para ver de nuevo en un escenario a ORISHAS. Con algo de retraso, aparecieron en escena con el público ya entregado. A ORISHAS le ocurre como a ciertos grupos de culto que tienen su público incondicional hagan lo que hagan; y esos se dieron cita el pasado viernes. Entregados de principio a fin, a los que la hora y media que estuvieron sobre el escenario les supo a poco.

Primer acorde de “Represent” y como un coro de colegio, toda la pista se puso a cantar y dar botes. Se podía respirar un ambiente festivo y de comunión con el público especial, que solo se da cuando el grupo tiene los sentimientos a flor de piel y lo sabe transmitir con sus canciones al público. “Atrevido” de su primer disco y “Bembé”, siguieron haciendo las delicias del respetable, pero fue a la cuarta canción del concierto cuando llegó “A lo cubano”, sin duda la canción por la que se dieron a conocer en España, y que fue la que desató la locura entre los que plagábamos la pista.

De ahí al final del concierto, todo fue un camino de rosas para los buenos de ORISHAS, que con temas tan conocidos como “El Kilo”, “Mi Barrio” u “Orishas llegó” mantuvieron una comunión perfecta con pista y gradas.

Quizás se echó en falta algo más de calidad en el sonido; en más de una ocasión los instrumentos estaban más bajos que las voces, y eso se notaba. Incluso alguna vez se quedaron sin sonido exterior. Me imagino que será culpa del técnico de sonido de ORISHAS, ya que el miércoles cuando acudimos a la cita de  BRYAN FERRY, aquello sonaba a la perfección, sin pega ni fallo alguno.

Momento emocionante y especial mención a la aparición en escena de BEATRIZ LUENGO, para cantar junto con ORISHAS, un nuevo tema escrito por ella misma. Sin duda, Madrid es la capital fetiche de ORISHAS, y así lo hicieron saber ambos.

Esperemos que la vuelta de este grupo mestizaje siga cosechando éxitos y no se deje influenciar por modas actuales latinas,  siendo fieles a su estilo de Son cubano, hip-hop con letras transgresoras y que cuentan la realidad social.

Todo un honor haber podido asistir a esta vuelta a los ruedos de ORISHAS, máxime cuando yo fui uno de los pocos que en año 2000 asistieron a su primer concierto en Madrid…

¡Cuánto ha llovido y qué poco se les nota a estos magos de los micrófonos los 17 años desde su estreno en la capital!

Txt: Fernando García

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